lunes, 21 de julio de 2014

FILOSOFO, OBRAS Y ALGO MÁS

MARCO AURELIO
MEDITACIONES
LIBRO III

4. No consumas la parte de la vida que te resta en hacer conjeturas sobre otras personas, de no ser que tu objetivo apunte a un bien común; porque ciertamente te privas de otra tarea; a saber, al imaginar qué hace fulano y por qué, y qué piensa y qué trama y tantas cosas semejantes que provocan tu aturdimiento, te apartas de la observación de tu guía interior. 

Conviene, por consiguiente, que en el encadenamiento de tus ideas, evites admitir lo que es fruto del azar y superfluo, pero mucho más lo inútil y pernicioso.

Debes también acostumbrarte a formarte únicamente aquellas ideas acerca de las cuales, si se te preguntara de súbito: «¿En qué piensas ahora?», con franqueza pudieras contestar al instante: «En esto y en aquello», de manera que al instante se pusiera de manifiesto que todo en ti es sencillo, benévolo y propio de un ser sociable al que no importan placeres o, en una palabra, imágenes que procuran goces; un ser exento de toda codicia, envidia, recelo o cualquier otra pasión, de la que pudieras ruborizarte reconociendo que la posees en tu pensamiento. Porque el hombre de estas características que ya no demora el situarse como entre los mejores, se convierte en sacerdote y servidor de los dioses, puesto al servicio también de la divinidad que se asienta en su interior, todo lo cual le inmuniza contra los placeres, le hace invulnerable a todo dolor, intocable respecto a todo exceso, insensible a toda maldad, atleta de la más excelsa lucha, lucha que se entabla para no ser abatido por ninguna pasión, impregnado a fondo de justicia, apegado, con toda su alma, a los acontecimientos y a todo lo que se le ha asignado; y raramente, a no ser por una gran necesidad y en vista al bien común, cavila lo que dice, hace o proyecta otra persona.
Pondrá únicamente en práctica aquellas cosas que le corresponden, y piensa sin cesar en lo que le pertenece, que ha sido hilado del conjunto; y mientras en lo uno cumple con su deber, en lo otro está convencido de que es bueno.

Porque el destino asignado a cada uno está involucrado en el conjunto y al mismo tiempo lo involucra. Tiene también presente que todos los seres racionales están emparentados y que preocuparse de todos los hombres está de acuerdo con la naturaleza humana; pero no debe tenerse en cuenta la opinión de todos, sino sólo la de aquellos que viven conforme a la naturaleza

TEXTO COMPLETO EN LIBRO ONLINE:
http://www.edu.mec.gub.uy/biblioteca_digital/libros/M/Marco%20Aurelio%20-%20marco%20aurelio%20meditaciones.pdf